Para la boda de Maite y Javier nos desplazamos hasta Ontinyent.
Empezamos con la vestida de Javier, a quien le ayudó a vestirse su cuñada.
Maite, la novia, nos recibió con los nervios a flor de piel, se vistió con la ayuda de las mujeres más importantes en su vida, su madre y sus tías.
Tanto la ceremonia como el convite tuvieron lugar en Bocairent, la Sala Serratella en el Hotel Ferrero.
Durante la ceremonia, amigos y familiares dedicaron emotivas palabras a los novios, quienes tampoco dejaron escapar la oportunidad de declararse el uno al otro con unos discursos que hicieron brotar las lágrimas de la mayoría de los asistentes.
Además del intercambio de anillos, Javier y Maite, llevaron a cabo la ceremonia de la rosa. Esta tradición se basa en el intercambio de una rosa roja entre los novios, la tradición dice que hay que guardar esa rosa en algún lugar visible del hogar para recordar cada día el compromiso y amor que la pareja se ha prometido. Con el tiempo la rosa se tiene que ir renovando así como su amor y cada vez que se regalen una se traducirá en una frase clara, “todavía te quiero”.
La música fue la encargada de unir a esta pareja, así que no podía faltar en un día tan importante. Al acabar la ceremonia, Maite y Javier, tocaron una pieza a dúo para todos sus invitados.
Durante la cena se desencadenaron las sorpresas: detalles para los padres, para los hermanos, para los amigos, besos, abrazos, muchas lágrimas y muchas risas.
Este fin de semana volvimos a reunirnos con esta pareja para realizar la sesión de fotos postboda que pronto os enseñaremos.
Aquí podéis ver un resumen del día de la boda y, al final, el tráiler del vídeo:

El vídeo: